Aquí,
para darte mis manos
no serás trigo solitario
aquí me tienes
como el viento que mece .
Me disculpo
por el ejercito de hormigas
que me fluye al mirarte
por el eco hambriento del corazón
que se escucha como el mar.
aquí me tienes,
como la arcilla
después que cruza la ola
esperando calor para sentirse fuerte.
La soledad
no le pertenece a nadie
es la hija ciega esperando que sonrías
el pedregal
esperando que eches raíces.
Aquí estoy
para que vueles con mis palabras
entre el murmullo de las golondrinas
te doy la esperanza entera
ya que la eternidad junto a ti me alimenta.
Aquí estoy
para darte de nuevo
mis manos.
RosarioAlons